La víctima terminó con heridas graves causándole parálisis en ambos antebrazos. “El perro era más grande que yo y no me quería soltar. Todo el tiempo me quería atacar la cara o el cuello, me quería matar” relató.
Viviana Contreras denunció un dramático episodio ocurrido cuando visitó a una amiga en el barrio Ciudadela, donde fue atacada por el perro de la casa, sufriendo graves heridas.
“Un día me visita mi amiga en casa y yo le digo que no estoy porque andaba haciendo compras, y le dije que cuando llegara le avisaba. Le avisé que había llegado y me manda un audio diciendo ‘ahora no puedo ir, pero venite’ porque la hija estaba con contracciones” relató en diálogo con Comodoro 24.
“Al llegar a su domicilio ella estaba afuera y nos quedamos en el patio. En cuanto salen los perros de adentro de la casa, uno me olfatea y cuando va por la mitad del cuerpo me ataca y pongo los brazos”.
La denunciante señaló que conocía a la familia desde su llegada a la ciudad. “Yo los conozco desde que llegaron a Comodoro. Hemos ido siempre con mis hijos y ese día fui sola por la situación. Mientras se bañaba la hija esperamos ahí afuera. A todo esto ella da aviso a su yerno de la situación de la hija embarazada”.
“Cuando el perro me ataca, estuve peleando un buen rato con el perro que era más grande que yo porque no me quería soltar. Todo el tiempo me quería atacar la cara o el cuello, me quería matar. Duró entre 8 o 10 minutos, fue un largo tiempo. Ni siquiera podía gritar. En un momento el perro la atacó a ella cuando se interpuso. Cuando yo logro zafar del perro, ella cayó y ahí el perro fue a atacarla a ella” detalló sobre el ataque.
Tras lograr ingresar a la vivienda, la situación no mejoró. “Cuando me meto dentro de la casa escucho que ella llamaba al perro como para encerrarlo. En un momento ella entra y me decía ‘decime que hago’ y yo le pedía agua. Me desvanecía. Quería mi celular y le dije que llame a la policía y me dice ‘no a la policía no’“.
La ayuda llegó de otra persona: “El chico que venía en camino llega arriesgándose, porque el perro lo conocía hace poco. Él me alcanza mi celular que estaba en la ventana. Cuando me dan el celular yo llamo a mi otra amiga. Ella entendió que yo estaba ahí y llegó”.
“Salí toda ensangrentada y me fui sola. Cuando yo estaba adentro de su domicilio, ella lo que hacía era limpiar el piso la sangre, que era muchísima, y sacarme la sangre de las zapatillas con una rejilla. En esto yo agarré un toallón me lo envolví en el brazo y me fui. Me dejaron re tirada. Tengo las imágenes de ella teniendo su auto afuera estando la plaza con un montón de gente y no pidió ayuda” expresó.
El ataque la dejó con parálisis en los dos antebrazos. “Las cirugías las cubre la obra social, pero la Asociación de Anestesistas no trabajan con obras sociales. 4.130.000 pesos te cobra la anestesista particular. Todos cobran lo mismo. En el hospital hay una larga lista de espera para anestesistas y me dijeron que no era urgente”.
Denunció la falta de apoyo económico por parte de su amiga: “Ella me dijo que no tenía plata en este momento y que espere a que cobre. En un primer momento, le mandé el ticket de los antibióticos que me habían dado y los viajes que había hecho. Me dijo ‘no tengo plata, cuando cobre te paso’. Me transfirió lo de los viajes y lo de los antibióticos. Luego me dijo ‘cuando venga el auto veo como te lo paso'”.
Por otro lado, Contreras acusó al hijo de la dueña del perro de haberla agredido. “Le dije que su hijo me había agredido, que el perro ha venido afuera de mi casa, se suelta y viene, estando mis hijos y todos los vecinos. Ella lo único que me dice es ‘mi hijo no va a cambiar, quedate tranquila ya va a pasar todo y que va a estar todo bien’, pero nada más” concluyó.