Los vecinos que presenciaron el ataque, no podían salir del asombro por la violencia del hombre. Qué le dijo a las autoridades.
Un brutal hecho terminó con un ejemplar de puma asesinado por un hombre, quien lejos de ayudarlo del ataque de una jauría en plena madrugada, decidió matarlo.
Todo ocurrió en el barrio Sargento Cabral en la zona de La Arbolada en Alto Comedero, en la provincia de Jujuy. El hombre fue denunciado por los vecinos, por lo que ahora deberá pagar una multa y se le iniciaron acciones legales.
Un violento hecho sorprendió a los vecinos del tranquilo barrio. Según indicaron fuentes policiales, el puma se encontraba acorralado por una jauría de perros en la calle y luego asesinado a garrotazos por el dueño de los animales.
Los vecinos que presenciaron el ataque, no podían salir del asombro por la violencia del hombre, por lo que denunciaron la situación de inmediato.
Cómo fue el ataque
Los testigos aseguraron que el puma era parte de una familia de felinos que intentaba escapar de los perros, que son conocidos en la zona por su agresividad. El dueño de estos animales no decidió buscar la ayuda de autoridades y lejos de ello, decidió golpearlo.
“Los perros ladraban durante la madrugada y cuando el hombre salió de su casa, vio que uno de los pumas estaba acorralado y lo golpeó hasta matarlo”, relató Eduardo Vargas, integrante del Centro de Atención de la Fauna Autóctona de Jujuy (CAFAJU), dependiente del Ministerio de Ambiente de la provincia.
Tras la intervención de este organismo debido a la denuncia pública que se realizó, se pudo conocer que el puma era un ejemplar joven, lo que pone en evidencia la brutalidad innecesaria del ataque, señaló El Tribuno.
Las autoridades confirmaron que se pudo identificar al agresor, quien deberá pagar una multa y afrontar las acciones legales que le iniciaron, en el marco de la Ley Provincial N.º 3014, que protege a la fauna silvestre y prohíbe su caza, captura o traslado.
Según confesó, mató al puma por miedo, pero Vargas explicó que “El puma es un animal muy esquivo, que huye cuando detecta presencia humana o de perros. En general evita la confrontación. Solo si una hembra siente que sus crías están en peligro, puede reaccionar”.
Asimismo, el funcionario indicó que la creciente urbanización está forzando a estos ejemplares a expandir sus territorios. “Los pumas están en toda la provincia. Se adaptan, pero cada vez tienen menos espacio”, dijo.
Y recordó que la caza o agresión hacia la fauna silvestre es un delito y que seguirá adelante con las acciones legales correspondientes para sancionar al responsable de este ataque, como establece la legislación provincial. Las autoridades instan a la ciudadanía a denunciar situaciones similares y a colaborar en la protección de la biodiversidad de la región.