Los policías notaron su ausencia y lo encontraron en el techo de la Alcaidía. El detenido ya había protagonizado otra fuga en agosto.
Un nuevo incidente alteró la tranquilidad de la Comisaría Segunda de Caleta Olivia durante la noche del domingo, cuando el detenido judicial Emiliano Bunge intentó escapar de las instalaciones y dirigirse hacia la Alcaidía. El hecho ocurrió alrededor de las 21:33 horas y movilizó al personal de guardia, logrando frustrarse la fuga.
Según informó La Opinión Austral, el intento de evasión fue detectado mediante el sistema de vigilancia de la dependencia. El monitoreo del personal permitió observar a Bunge desplazándose por el techo con intención de avanzar hacia la calle José Hernández, aparentemente buscando saltar por un pasillo que conecta la cocina con la Alcaidía.
Al percatarse de la situación, se dio la voz de alto y el detenido fue rápidamente acorralado por uniformados de ambas divisiones policiales, que se encontraban en posición estratégica. En un intento desesperado por escapar, Bunge se lanzó hacia el interior del patio judicial.
A raíz del hecho, se activó un protocolo de seguridad y se llevó a cabo una inspección exhaustiva en el predio, verificando que todos los internos permanecieran en sus celdas, lo que descartó una fuga masiva. Durante la revisión se constató que el techo del baño presentaba daños, evidenciando el recorrido del detenido en su intento de escape. Según un efectivo a cargo del personal de alcaldía, la presencia de Bunge en el techo fue detectada gracias a los sensores de movimiento instalados en la zona.
Tras el incidente, la Dirección General de Criminalística intervino y sus peritos realizaron las diligencias correspondientes para determinar causas y responsabilidades. Las autoridades evalúan la posibilidad de reubicar a Bunge en otra dependencia policial o en una localidad distinta de la zona norte.
La primera fuga
Bunge ya había sido noticia en agosto de este año, cuando protagonizó una audaz fuga de la Comisaría Tercera de Caleta Olivia, ubicada en la esquina de Matheu y avenida Eva Perón, en el barrio 2 de Abril. El incidente ocurrió el sábado 9 de agosto alrededor de las 18:30 horas.
Según fuentes policiales, Bunge, quien se encontraba alojado en un calabozo ciego sin instalaciones sanitarias, solicitó permiso para usar el baño y aprovechó un descuido del personal policial, que estaba atendiendo un llamado telefónico, para escapar por una ventana.
Finalmente, el 10 de agosto, Bunge se entregó en las dependencias del Ministerio de Seguridad, ante la presencia del ministro, el director de la Regional Norte, el comisario mayor Cristian Cancinos y el secretario de Estado de Seguridad. Se informó que allegados del detenido habían comunicado al jefe de una dependencia policial que él solo se entregaría ante el ministro, con el fin de preservar su integridad física al momento de ser recapturado.