Don Miguel es un peón de campo, quien se encontraba durmiendo en precarias condiciones cuando se desató un incendió del que pudo salvarse de milagro
La indignante situación se conoció este martes, tras una intervención de la policía de Pirámides. El hombre había sufrido heridas luego del siniestro y, tras conocerse la situación, fue atendido y alojado por el encargado de un campo vecino. Intervinieron distintas instituciones, entre ellas, personal de Trata de Personas de Nación y Migraciones. Además de las precarias condiciones laborales al hombre tampoco le pagaban por su trabajo desde 2021.
Jornada contó la historia de Don Miguel, quien una noche encendió las velas y se recostó. Era sábado, un día más como cualquier otro dentro de los muchos años que llevaba trabajando y viviendo allí. El clima estaba agradable, pero en el alejado campo de Península Valdés soplaba el viento y hacía un poco de frío.
Al cabo de unos minutos se durmió, pero el intenso calor que comenzó a sentir lo arrebató del sueño, se despertó y salió como pudo. El fuego alcanzó a lacerarle la piel de la cara y le quemó el pelo, pero logró salir con vida. No tuvo tanta suerte con lo material, la precaria casa quedó consumida por completo.
Pasaron 4 días. Recién ahí, un vecino vio una columna de humo y se alarmó. Llamó a la policía y ahí acudieron al campo que cuidaba Don Miguel. El panorama era incluso peor de lo que se esperaban: un hombre de 80 años con quemaduras durmiendo en un galpón de acopio de lana, una vivienda de chapa consumida por completo y una compleja situación laboral.
“Alertados por un vecino, llegamos a un campo ubicado dentro de la Península, a unos 65 km de Pirámides, una zona muy alejada. Encontramos al hombre lastimado, descansando en el galpón y nos dijo que había perdido sus pertenencias en un incendio accidental con una vela”, detalló el comisario Walter Ibarra, jefe de la seccional policial de Pirámides.
El comisario recibió de Don Miguel un panorama sobre la delicada situación: “Es un hombre con complicaciones visuales producto de la avanzada edad. Trabaja en ese campo desde hace muchos años y no percibe dinero desde 2021. Según dijo, arregló un porcentaje de la venta de lana y, desde el año pasado, no concreta venta alguna”, relató el jefe de la comisaria de Pirámides.
Y agregó: “Hacia dos recorridos por semana. Trabajaba igual a pesar de que no cobraba nada ni veía bien”.
Cadena de intervenciones
Teniendo en cuenta la compleja situación, se le dio intervención a la Subsecretaria de Trabajo de Madryn quienes, a su vez, le dieron conocimiento a personal de la Oficina de Derechos Humanos de Nación y de Chubut.
De tal manera, en forma conjunta entre la policía de Pirámides, inspectores de Trabajo, representantes del gremio UATRE, personal de la Oficina de Trata de Personas de Nación y Provincia y también de Migraciones, armaron una batería de funcionarios para resolver los múltiples problemas que atravesaban esta situación.
Y es que las irregularidades chorreaban por todos lados. Los inspectores de Trabajo labraron las correspondientes actas debido a, solo para empezar: condiciones de seguridad e higiene deficiente y falta de remuneración. Pero la investigación sigue y, seguramente, aparecerán más cosas.
A causa del incendio Don Miguel perdió todo, pero, tal vez, gracias a la intervención de las distintas instituciones, pueda comenzar a recuperar algo más que solo lo material. Por disposición de los funcionarios de Trabajo, Don Miguel fue retirado del lugar y quedó alojado en un campo aledaño.
“Lo recibió el encargado de un campo vecino, un hombre que conocía al abuelo y que no tuvo inconvenientes en recibirlo y brindarle alojamiento”, informó el comisario Ibarra.
Y concluyó: “Más allá de la desgracia del incendio, de alguna manera sirvió para que lo encontráramos”.