Ángel Valentino Fuentes Suárez, el bebé que fue dado por muerto al nacer y luego encontrado con vida en la morgue, recibió el alta médica tras más de 90 días de internación. La emotiva noticia fue celebrada por su familia y por toda la comunidad santacruceña que siguió de cerca su recuperación.
Ángel Valentino Fuentes Suárez, el bebé que conmovió a toda Santa Cruz por su increíble historia de supervivencia, fue dado de alta médica el pasado 10 de julio tras permanecer más de 90 días internado. Desde entonces, se encuentra al cuidado y acompañado por su familia, que celebró con profunda emoción este esperado momento.
La historia de Ángel comenzó el 25 de marzo, cuando su mamá, Maira Suárez, de 18 años, dio a luz de manera repentina en la puerta del baño del Hospital de Las Heras, con apenas 28 semanas de gestación. El bebé fue trasladado de urgencia a Caleta Olivia, pero en el camino, su padre Brian Fuentes (17) recibió la trágica noticia de que su hijo había sufrido un paro y había fallecido.
Sin embargo, al ir a despedirse en la morgue, las abuelas del pequeño notaron que el bebé aún respiraba. Ese instante marcó el inicio de una larga y difícil recuperación, que hoy tiene un final feliz.
El equipo de Neonatología del Hospital Zonal “Padre Pedro Tardivo” de Caleta Olivia compartió la noticia con profundo cariño: “Hace algunos días despedimos con mucho amor y nostalgia a nuestro mimado Ángel”, expresaron en sus redes, acompañando el mensaje con imágenes del emotivo momento.
“Después de más de 90 días en neo, con días buenos y malos, momentos de alegría e incertidumbre, estamos felices de que haya podido volver a casa con sus papás, quienes estuvieron siempre presentes, acompañándolo con mucho amor y responsabilidad”, agregó el equipo médico.
Brian, el papá del pequeño, también agradeció a la comunidad por el apoyo constante: “Gracias a todas las personas que ayudaron, que donaron ropa, que colaboraron para que pudiéramos estar cerca de nuestro hijo”, expresó. La familia se alojó durante semanas cerca del hospital para poder visitarlo a diario.
Finalmente, Paola, la abuela materna de Ángel, también quiso destacar la labor del personal de salud: “Estoy más que agradecida con médicos y enfermeras, que estuvieron las 24 horas, todos los días, con mi nieto. No tengo palabras, solo gratitud”.
La historia de Ángel, el bebé que volvió a la vida, es hoy un símbolo de esperanza y amor para toda la provincia.
Fuente: La Opinión Austral