César Calluqueo tiene Alzheimer y había dejado de tomar la medicación. “Los psicólogos nos dijeron que pudo haber tenido alucinaciones”, dijo uno de sus hijos.
Alrededor de las 16.00 de este domingo, César Calluqueo le dejó una carta en la mesa a su esposa, que se había recostado a dormir la siesta. Le avisó que se iba a caminar, algo que hacía todos los días durante una hora. A las 17.00, siguiendo la línea de sus horarios, ya debía haber regresado a su casa. Sin embargo, pasaron cuatro días y su familia no sabe nada sobre su paradero.
“Patito”, como le dicen, tiene 74 años y solía hacer el mismo recorrido por la calle Campos, bulevar Bransden y Vitali, en la ciudad pampeana de General Acha. Cuando se hicieron las 18.00, la mujer comenzó a preocuparse y les avisó de inmediato a sus cuatro hijos.
Durante la noche, fueron todos a hacer la denuncia a la comisaría por “desaparición de persona”. En medio de la angustia, se supo que César tiene alzheimer y se encuentra bajo tratamiento médico.
Sin embargo, desde el fin de semana que no toma la medicación porque cuando fue a retirar sus remedios, la receta estaba vencida y necesitaba una nueva. “Los psicólogos nos dijeron que pudo haber tenido alucinaciones”, le comentó a TN su hijo, también llamado César.
Un grupo de personas lo vio alrededor de las 17.30 de ese mismo domingo, aunque no se imaginaron que estaba perdido: “Lo vieron caminando, era gente del pueblo que lo saludó”.
Las cámaras de seguridad pudieron registrarlo por última vez a unos seis kilómetros de su casa, en un lugar al que normalmente no iba. En el rastrillaje que se realizó allí vieron huellas de las alpargatas que tenía puestas ese día.
“No sabemos si alguien lo alzó y lo llevó a otra parte del pueblo. Al tener alzheimer, puede haberse equivocado”, consideró su hijo. De igual modo, puntualizó que su hermano -y otro de los hijos del desaparecido- vive en 25 de Mayo, provincia de Buenos Aires: “Puede ser que haya hecho dedo para ir para allá, pero no sabemos”.
Los investigadores, en tanto, no descartan que se haya metido en el monte. “Si está metido ahí, me dicen lo peor. El monte es muy bravo, hay muchas espinas”, señaló su hijo.
En el operativo intervienen agentes de la Policía de La Pampa, perros de búsqueda, bomberos, Gendarmería y una gran cantidad de vecinos que ofrecieron su ayuda desinteresada.
Los rastrillajes se realizan en áreas específicas como el camino vecinal de Gamay y la Ruta Provincial 9. Abarcan predios antiguos como La Carbonera, Tajamares, El Embudo, El Escondido y La Bonanza, además de lagunas y campos.
César es delgado, tiene pelo blanco corto, mide 1.70 y no tiene tatuajes ni aros. Cuando fue visto por última vez, vestía una remera blanca lista, jogging azul, alpargatas azules, gorra negra y lentes claros. Ante cualquier información sobre su paradero comunicarse al 2345515378.