Un vecino denunció que 30 personas se encontraban comiendo en la vereda y la policía les secuestró la parrilla encendida.

Un vecino denunció que 30 personas se encontraban comiendo en la vereda en el barrio porteño de Saavedra y la policía les secuestró la parrilla encendida. Los agentes de la policía verificaron los hechos y efectivamente un grupo personas estaban alrededor de una plazoleta haciendo un asado. Los uniformados pidieron que lo dejaran de hacer y luego de varias advertencias los infractores guardaron la parrilla.
Por este motivo los presentes empezaron a mostrarse hostiles con el personal policial, dificultando la tarea. No obstante, igualmente se pudo llevar a cabo lo dispuesto por la Justicia, secuestrándose la parrilla y la carne que fue enviada a bromatología. Horas más tarde, las autoridades policiales finalmente le devolvieron la parrilla a sus dueños.