El impacto en las boletas de luz y gas que pagarán los usuarios finales será del orden del 4% y en el Gobierno confían en que se sienta menos a partir de la baja del consumo.
Ahora, en noviembre, volverán a subir. Según consignó Liliana Franco este jueves en Ámbito, las tarifas de luz subirán 2,5% y las de gas 2,7%.
El Gobierno apuesta a que, dado que en la primavera, suele bajar la demanda de gas y electricidad por las temperaturas más altas, el aumento promedio de 4% final de las boletas se verá compensado en los hogares con la caída en las cantidades consumidas.