Un vecino la encontró tirada en un descampado de Río Gallegos. Tras cuatro días de recuperación, comió y pudo caminar.
Un nuevo hecho de crueldad animal ocurrido en Río Gallegos expone el nivel de violencia que pueden sufrir los animales, pero también destaca el compromiso de quienes se niegan a mirar para otro lado. Una perra de raza border collie, de alrededor de un año, fue encontrada gravemente herida en un descampado, con múltiples fracturas en el cráneo producto de una brutal golpiza.
El hallazgo tuvo lugar la noche del sábado 14, cuando Javier, un vecino del barrio Padre Olivieri, recorría la zona en bicicleta junto a sus perros. En medio de la oscuridad, algo llamó su atención mientras alumbraba con linternas.
“Esa zona es muy oscura y no se ve nada. Salió con la bici y linternas para guiarse. Mientras hacía su recorrido encontró a la perrita. Siguió, pero después volvió porque no creyó lo que estaba viendo”, contó Isis, su pareja, en diálogo con La Opinión Austral.
El impacto de lo que había visto lo llevó a regresar. “Tenía la duda porque quedó en shock. Fue muy fuerte cuando la vio”, relató Isis. Allí confirmó lo peor: una perrita ensangrentada que apenas respiraba, tendida en los arbustos.
“Él pensaba que no iba a vivir porque era mucha sangre la que estaba corriendo de su cabeza”, recordó su pareja. Según lo que pudieron observar, había estado dentro de una bolsa de alimento para perros, completamente cubierta de sangre, de la que logró salir arrastrándose.
La posibilidad de que alguien más la encontrara era casi nula. “Una persona en auto nunca la iba a ver, y caminando, tampoco”, señaló Isis, remarcando lo milagroso del hallazgo.
Una carrera contra el tiempo para salvarla
Ya en plena madrugada, conseguir atención veterinaria fue una urgencia. Isis recurrió a las redes sociales para pedir ayuda y logró contactar a la Fundación Narices Frías, que la puso en contacto con un profesional dispuesto a atender el caso de inmediato.
“Me desesperé porque quería que recibiera atención rápido. Uno no quiere que se mueran y hace todo lo posible porque ellos también merecen una segunda oportunidad”, expresó conmovida.
Al examinarla, el veterinario confirmó una fractura abierta de cráneo y otras dos en distintas partes de la cabeza y el hocico. “Tenía un hoyo en su cráneo. Fue impactante, fue súper impactante”, lamentó.
También descartó de plano que las heridas hayan sido provocadas por otros animales. “Me dijo que por mordedura de perros es imposible, porque solamente tiene heridas en el cráneo, no en el cuello ni en otras partes del cuerpo. Por una pelea de perros, imposible”, explicó Isis. “Dijo que tiene que haber sido un golpe muy fuerte realizado por una persona”.
La lucha de Luz de Esperanza
La border collie, a quien llamaron Luz de Esperanza, atravesó sus primeros días en estado crítico, recibiendo antibióticos y analgésicos. “Había que dejarlo en manos de Dios también”, contó Isis. En ese momento, lo único que podía mover eran los ojos.
El domingo llegaron los primeros signos positivos durante una nueva revisión, pero fue el lunes cuando logró ponerse de pie por primera vez, marcando un avance en su recuperación.
Para el miércoles, el cambio era evidente. “Hoy está mucho mejor, comió un alimento especial. Ha comido dos veces en el día, súper bien porque ha comido bastante. La tomé en brazos y la llevé al patio, caminó y después entró a la casa. Viene bien”, compartió con alivio su cuidadora.
Una larga recuperación
A pesar de la mejora, la recuperación será lenta. “Todavía le falta mucho, está débil e inestable, pero ya salió del estado crítico. Ahora está en modo recuperación”, explicó. Debido al golpe en el hocico, la perrita perdió parcialmente el olfato y aún le cuesta detectar la comida. “Si le muestro la comida, no come. Le cuesta sentir el olor, entonces le coloco cerca la comida y ahí recién come”.
Su movilidad también es limitada. “Camina como si estuviera borracha, pero en realidad es que no tiene fuerza. Perdió tanta sangre… Pero está bien, está avanzando de a poco, eso me pone contenta”, dijo Isis. A veces, ni siquiera puede levantarse para hacer pis, por lo que evalúan colocarle pañales.
La historia de Luz de Esperanza despertó una gran reacción en la comunidad. Muchas personas ofrecieron colaborar, aunque Isis pidió que toda la ayuda se canalice a través de la Fundación Narices Frías, que cubre los gastos médicos.
Quienes quieran colaborar pueden hacerlo por Mercado Pago al alias F.NARICES.FRIAS o por Banco Nación al alias narices.frias.nacion. También se recibe alimento balanceado especial de tipo Recovery, necesario para su nutrición en esta etapa.
Isis ya imagina un futuro para Luz: “Más adelante, cuando esté en condiciones y su salud esté mucho mejor, está la posibilidad de buscarle un buen hogar”.