Un exintendente de una localidad cordobesa fue condenado a cuatro años de prisión por envenenamiento y asesinato de al menos 211 perros

La Cámara 8° del Crimen de Córdoba, integrada Eugenio Pérez Moreno, Juan Manuel Ugarte y Marcelo Jaime, resolvió por unanimidad que el exfuncionario fue “instigador penalmente responsable de losdelitos de daño calificado e infracción a la ley 14.346 por malos tratos y actos de crueldad a los animales,ambos en concurso ideal”.
También cinco empleados municipalesfueron condenados a tres años de prisión por coautoría. Se trata deDiego Oscar Allendes, Juan Santos Márquez, Darío Mercedes Palomeque, Pablo Daniel Palomeque y Roque Enrique Quinteros Nievas.

Este fue el segundo juicio que afronta Facchín por el mismo tema, ya que en 2015 la Cámara 12° del Crimen de Córdoba lo absolvió por falta de pruebas. Sin embargo, el Tribunal Superior dispuso que fuera nuevamente juzgado junto a otros acusados tras el pedido de la fiscalía y la querella.
Al conocer la sentencia, la presidenta de la Protectora de Animales, Lilian Lourdes Luna, expresó: “Se hizo Justicia. Esperamos nueve años para que esos pobres animales descansen en paz. Esperemos que esto sirva de precedente para que no se vuelvan a cometer estas matanzas”.
Por su parte, Pedro Despouy Santoro, el abogado querellante, afirmó que el fallo “sienta precedentea nivel país porque se vienen escuchando casos similares en distintos puntos de la Argentina”.
En ese sentido, calificó a este tipo de maltratos como “un recurso criminal para intentar solucionar la problemática de superpoblación canina sin acudir a formas éticas como las castraciones a cargo de organismos públicos competentes”.
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El espeluznante envenenamiento de los perros
En lamadrugada del 28 de abril de 2013, el ahora exintendente ordenó a un grupo de empleados municipales envenenar a los perros. ¿Cómo? En móviles de la comuna se repartieron albóndigas de carne mezcladas con un potente veneno. Al día siguiente, fallecieron al menos 211 animales.
La sustancia utilizada fue Metomil, un agroquímico de elevada toxicidad que suele utilizarse en cultivos de alfalfa para forraje. Además de esparcirlos en calles, fueron arrojados en casas de personas vinculadas con la protección y los refugios de animales.
Incluso algunas personas también presentaron síntomas y una niña de siete años fue trasladada a Córdoba para ser atendida con un cuadro grave.