El 20 de diciembre marca el fin de una era para el “Nido Gaucho”, un bar tradicional de nuestra ciudad que ha sido un referente para la comunidad durante 34 años.
La falta de renovación en el contrato de alquiler ha obligado a los dueños, a cerrar este espacio tan querido. Marisol, quien ha trabajado en el bar durante más de tres décadas, recuerda con nostalgia los platos emblemáticos que ofrecieron, como el asado y las empanadas, y la calidez de su clientela. “Llevo 33 años aquí, siempre en la cocina. Este lugar ha sido mi vida, es un pedazo de mí”, comenta visiblemente emocionada.
Uno de los clientes más fieles, “Gitano”, quien comenzó a venir al lugar cuando tenía solo 3 años y hoy tiene 67, señala lo importante que fue para él: “Es como mi segunda casa. Este bar tiene sabor a hogar, es donde mejor se come”. La conexión de los vecinos con “Nido Gaucho” es profunda, ya que no solo era un espacio para comer, sino un punto de encuentro familiar.
En tanto, Melitón Ferreira, hijo de Marisol y propietario, expresa con pesar el cierre, pero se muestra optimista sobre el futuro. “Mi papá lo creó, y yo crecí aquí. Este lugar es mi vida. Lo bueno es que nos vamos con la frente en alto, y buscaremos un lugar más grande, para estar más cómodos”, asegura. El negocio de la familia ha estado presente en la comunidad por generaciones, lo que hace aún más difícil este adiós. Sin embargo, Ferreira subraya que, aunque “Nido Gaucho” ya no ocupará ese local, continuará siendo parte de Comodoro Rivadavia. “Nido Gaucho es una marca registrada. Es más que un bar, es parte de la historia de Comodoro. No importa la calle, seguimos siendo los mismos”. Aunque esta despedida marca el final de una etapa, los familiares del bar buscan rápidamente un nuevo lugar, con la esperanza de poder seguir ofreciendo su cocina casera y el cariño a su gente, que sin dudas, extrañará este querido bar.
