La víctima descubrió un celular oculto en el baño de una estación de servicio, apuntando hacia el inodoro. El hecho, viralizado en redes, derivó en una investigación judicial y la separación de un empleado.
Una joven denunció que encontró un celular oculto en el techo del baño de una estación de servicio en Tres Lagos, con la cámara apuntando hacia el inodoro. El hecho, que rápidamente se viralizó en redes sociales, derivó en una investigación judicial y en la separación de funciones de un empleado. La Justicia ordenó el secuestro del dispositivo para realizar pericias y determinar si hubo intencionalidad en el acto.
El incidente ocurrió en la estación de servicios de la localidad de Tres Lagos, operada por la Comisión de Fomento del pueblo y perteneciente a la cadena EPA del Estado de Santa Cruz. La denunciante, una joven que viajaba desde El Calafate hacia Gobernador Gregores, hizo una parada en el lugar para usar el baño. Fue allí donde, al desvestirse, notó un teléfono celular colocado en un hueco del cielo raso, con la cámara apuntando directamente hacia el inodoro.
“Si llegan a ver un video mío meando, es porque el degenerado del playero de la estación de Tres Lagos lo grabó”, escribió la joven en sus redes sociales, donde relató el hecho con indignación. La mujer no utilizó el baño y, al salir, consultó a una empleada sobre el mantenimiento del lugar. La respuesta fue que esa tarea correspondía a los playeros. Minutos después, otro empleado se acercó para preguntarle dónde estaba el teléfono, lo que levantó sospechas en la denunciante. El trabajador ingresó al baño de hombres, accedió al techo y recuperó el dispositivo, afirmando que pertenecía a uno de los playeros.
La joven no tardó en hacer pública su denuncia en redes sociales y, horas después, recibió un llamado de la policía de Tres Lagos, instándola a formalizar la denuncia. Así lo hizo en la comisaría de su localidad, lo que activó la intervención judicial. El juzgado de El Calafate ordenó el secuestro del celular del playero sospechoso y su sometimiento a pericias informáticas para determinar si hubo grabación y, de ser así, qué contenido tenía.