Un hombre fue detenido en una estancia desocupada. Le encontraron costillares, cuartos y lenguas bovinas; y un cuchillo con restos de carne en la camioneta.
Una estancia sin ocupantes en Santa Cruz. En ese escenario, un presunto cazador furtivo encontró una buena ocasión para, aparentemente, ponerse a faenar a plena luz del día y con total impunidad las vacas ajenas que -presuntamente- acababa de matar con su carabina, en un posible caso de robo de ganado.
Pero el hombre no tomó en cuenta que, alguien de un establecimiento rural vecino donde sí hay gente de manera permanente, lo vio en plena tarea y dio aviso a la policía.
Cuando los agentes de la División Operaciones Rurales de Gobernador Gregores llegaron al lugar, lo sorprendieron con bastante evidencia en su contra.
Según se informó, el procedimiento realizado en la estancia San Miguel, ubicada sobre la ruta provincial 73, se inició luego de la denuncia de un hombre residente en un establecimiento vecino, llamado La Siberiana, quien alertó a las autoridades sobre la presencia de una camioneta sospechosa en la otra propiedad, donde no hay ocupantes.
En plena faena en una estancia de Santa Cruz
Según declaró el denunciante, cuando circulaba por la zona vio al sospechoso en plena faena de los animales que presuntamente acababa de cazar de manera ilegal en la zona.
Efectivamente, en el lugar señalado los policías dieron con una camioneta Toyota Hilux de color gris y con su conductor, identificado como Raúl Horacio Rutherford Núñez, de 63 años y habitante de Gobernador Gregores.
Al inspeccionar el vehículo que despertó las sospechas del denunciante, los efectivos hallaron elementos contundentes.
Según el informe policial, contabilizaron 12 paletas con costillas, 12 cuartos y seis lenguas de bovino, que acorde a las sospechas, no contaban con documentación que explicara de dónde provenían.
No sólo eso: en la camioneta dieron con un arma de fuego tipo carabina calibre 22, con mira telescópica y un cargador con cuatro municiones, junto a una caja con otros 29 proyectiles y 13 vainas servidas.
El último elemento de prueba, también contundente, que recogieron en el lugar es un cuchillo con restos de carne y manchas rojizas en el filo, que parecía dar cuenta de que lo declarado por la persona que dio aviso se correspondía con lo que había pasado: el hombre acababa de faenar los animales en el lugar.
Tras las actuaciones correspondientes, la policía secuestró la camioneta, la carne, el arma y los demás elementos hallados.
Al mismo tiempo, Rutherford Núñez fue demorado y trasladado al hospital de Gregores, donde los médicos determinaron que debía quedar internado debido a una afección respiratoria.
A partir de las actuaciónes, la División Rural continúa con la investigación para determinar el posible caso de abigeato y otras faltas cometidas por el sospechoso, como la caza ilegal, además de determinar si actuó solo o tuvo cómplices.