La emoción marcó el brindis de fin de año organizado por el equipo de salud, liderado por la neumonóloga infantil Sandra Barría. Con más de 27 años de tradición, esta celebración se convirtió en un homenaje a la vida y a los pacientes pediátricos que lograron superar graves patologías durante el año.
“Es una alegría indescriptible llegar a fin de año y poder organizar este brindis que hacemos desde hace tanto tiempo. La idea siempre es festejar la vida, celebrar la recuperación y reencontrarnos en un contexto más distendido después de un año complicado”, expresó emocionada la Dra. Barría.
La celebración no solo reunió a los pequeños pacientes que recibieron el alta este año, sino también a aquellos que pasaron por las mismas luchas décadas atrás. “Hoy vinieron algunos de mis primeros pacientes, que ahora tienen 27 o 30 años, muchos de ellos con sus hijos, que también son mis pacientes. Es una alegría enorme verlos sanos, acompañados por sus familias y disfrutando de este momento tan especial”, comentó Barría.
La neumonóloga destacó que 2023 fue un año particularmente exigente debido a un aumento significativo de patologías respiratorias en niños tras un período de relativa calma post-pandemia. “Después del COVID, tuvimos un respiro, pero este año la patología respiratoria volvió con fuerza. Tuvimos muchos casos graves, pero logramos salir adelante gracias al trabajo en equipo y el esfuerzo conjunto”, afirmó.
Durante el evento, Barría agradeció la dedicación de los médicos pediatras, terapistas, enfermeros y kinesiólogos del Hospital Regional, así como el apoyo de su propia familia. “Gracias a ellos, mis pacientes están bien. Hay que destacar la calidad de atención pediátrica, tanto en terapia como en el área de pediatría del hospital. Este trabajo nos da estas alegrías: acompañar a los pacientes en sus momentos más difíciles y luego verlos recuperados, felices y junto a sus familias”, subrayó.
El Hospital Regional continúa posicionándose como un pilar esencial en la atención pediátrica de la región, y eventos como este brindis son un recordatorio de la dedicación de sus equipos de salud. “Es hermoso disfrutar de esta jornada con mis colegas, pacientes y seres queridos. Esta tradición celebra algo más que el fin de año: celebra la vida, la esperanza y la posibilidad de seguir adelante”, concluyó Barría.