Con los fríos de otoño comienzan a llegar los primeros resfríos y gripes del año. Esta es la sopa que te protege de las bajas temperaturas.
En estos días fríos de otoño, una carnicería de la Ciudad de Buenos Aires comenzó a promocionar su caldo de huesos, “el que cocinaba la abuela” con su particular apodo: “El levantamuertos”. Es una original forma de reutilizar cortes y trozos de la vaca que forman parte del descarte luego del deposte.
Se trata de la carnicería “Nucho, el rey de la molleja”, ubicada dentro del Mercado del Progreso en el barrio porteño de Caballito que es un símbolo histórico en la zona. Puso a promocionar el caldo de hueso para sus clientes habituales.
¿Qué es el caldo de hueso?
El caldo de hueso es una preparación tradicional que consiste en cocinar huesos de animales (como pollo, res, cerdo o pescado) en agua durante un período prolongado de tiempo, a menudo con la adición de verduras, hierbas y especias. El proceso de cocción lenta permite que los nutrientes y minerales se liberen de los huesos y los tejidos conectivos, creando un caldo rico y nutritivo.
¿Por qué se le dice “levantamuerto” al caldo de hueso?
Se le dice “levantamuerto” porque tradicionalmente se considera que el caldo de hueso tiene propiedades revitalizantes y reconstituyentes. En muchas culturas, se cree que puede ayudar a recuperar fuerzas después de una enfermedad, una cirugía o simplemente cuando uno se siente débil o fatigado. Esta reputación probablemente se deba a su contenido nutritivo, que incluye colágeno, aminoácidos y minerales esenciales.