Jorge Cabero era intensamente buscado por la policía de Santa Cruz por ser el principal sospechoso de haber matado de tres balazos en la madrugada del domingo a otro joven en Pico Truncado, cuando se realizaba una fiesta clandestina en una vivienda ubicada en la calle Mosconi.
La víctima fatal, Leonel Irigoyen, tenía 22 años y habría expirado cuando era trasladado en un auto particular hasta la guardia del Hospital Distrital de esa misma localidad.
Cabero, de aproximadamente 23 años (foto), había escapado junto a su pareja, Daiana Gutiérrez, pero los investigadores constataron que luego se separaron y que el presunto homicida se había dirigido hacia Los Antiguos con la intención de cruzar la frontera internacional para llegar inicialmente a la población de Chile Chico.
El diario La Opinión Austral reportó que cubrió el trayecto de los casi 300 kilómetros que separan a Pico Truncado de Los Antiguos, por la Ruta Provincial N° 43 a bordo de un automóvil Chrysler de color rojo.
Lo había hecho en la mañana de este lunes pero no viajaba solo sino que lo acompañaba otro peligroso sujeto que tenía pedido de captura de la justicia por una causa abuso sexual agravado con acceso carnal, pero del cual no trascendió su identidad.
Para ubicar al presunto homicida, policías de la DDI de Truncado intervinieron el teléfono de su novia que se reportaba en Caleta Olivia y de esta manera pudieron saber que se dirigía hacia Los Antiguos.
Además, en un control de ruta, la DDI de Perito Moreno identificó al hermano y a otro familiar que igualmente se estaban dirigiendo a Los Antiguos donde ya había llegado Cabero.
De esta manera comenzó a cerrarse el cerco de búsqueda y el prófugo, al sentirse acorralado, decidió entregarse en horas de la tarde del lunes, en la comisaría de Los Antiguos.
Por otra parte, citando fuentes policiales, el portal digital del diario de Río Gallegos indicó que el homicidio de Irigoyen se habría originado por una pelea en la casa donde se realizó la fiesta clandestina.