A tres semanas de la desaparición de Pedro Kreder y Juana Morales, continúan los operativos y las pericias, pero la incertidumbre se profundiza. “Sabemos que se está trabajando, pero necesitamos respuestas”, manifestó Gabriela Kreder.

Ya pasaron tres semanas desde que Pedro Kreder y Juana Inés Morales fueron vistos por última vez, y la incertidumbre crece. Las familias continúan exigiendo avances concretos en la investigación, mientras cada jornada se vuelve más angustiante.
“Hace 20 días que no tenemos ninguna información. No hay pistas, no hay resultados. Es un tiempo más que prudente para tener algo y no está ocurriendo”, expresó Gabriela Kreder, hija de Pedro, al describir el difícil momento que atraviesan.
Según relató, la familia mantiene comunicación constante con el ministro, el fiscal y los equipos especializados que participan del operativo de búsqueda. “Hay gente de Santa Fe que vino con tecnología nueva y eso es muy útil para estos casos”, explicó, al tiempo que confirmó que se solicitaron los datos bancarios, registros telefónicos y material de cámaras de seguridad vinculados a la pareja.
En paralelo, aguardan los resultados de las pericias realizadas sobre la camioneta en la que viajaban Pedro y Juana, que podría aportar elementos clave. “Sabemos que se está trabajando, pero necesitamos respuestas. Vivimos en una incertidumbre total”, insistió.
Respecto a las imágenes que circularon en redes sociales y que algunos usuarios asociaron a los desaparecidos, Gabriela aclaró que ya fueron analizadas por los investigadores, aunque no se puede afirmar que se trate de ellos. “Buscamos alguna tecnología que permita obtener una imagen más nítida”, señaló.
Consultada sobre versiones que mencionaban un posible cobro de dinero por parte de su padre antes de desaparecer, fue contundente: “No tengo esa información, no la puedo confirmar ni negar, porque no la manejamos.”
La familia insiste en que cualquier dato puede ser crucial. “Estamos tratando de agotar todos los recursos. Es muy angustiante que pasen los días y no tengamos nada. Dos personas no pueden desaparecer de la noche a la mañana”, concluyó Gabriela.
