El nuevo incremento afecta a naftas y gasoil en todo el país. La medida responde al fuerte aumento del barril de crudo Brent, que ya subió más de 20% en junio.
El precio de los combustibles en Argentina volvió a moverse al alza en las últimas horas, en un contexto de fuerte tensión internacional por el conflicto en Medio Oriente. El aumento del petróleo crudo —más de un 21% en promedio en las últimas semanas— ya comenzó a reflejarse en los surtidores locales.
La primera en aplicar subas fue Puma, que dispuso un incremento del 5% en el precio del litro de combustible, según confirmaron fuentes del sector. A este ajuste se le sumaron otras empresas, entre ellas YPF, que modificó sus valores en estaciones de servicio de la Ciudad de Buenos Aires, según señala el diario La Nación.
En el caso de la petrolera estatal, el aumento fue del 2,5%, aunque desde la empresa señalan que están avanzando hacia un sistema de precios variables, sin tarifas fijas y con ajustes por zona, demanda y horarios.
De acuerdo con un relevamiento realizado por EconoJournal, YPF continúa siendo la empresa con los precios más bajos del mercado, con valores entre un 6% y 8% inferiores respecto a competidoras como Raízen (Shell), Axion Energy y Puma.
El nuevo esquema de precios, menos uniforme y más dinámico, responde tanto a la política comercial de las petroleras como a los movimientos internacionales del crudo, que se vio fuertemente alterado por el conflicto bélico entre Israel e Irán, generando incertidumbre en los mercados y encareciendo los costos globales de producción y transporte de hidrocarburos.
Se espera que el resto de las empresas termine de ajustar sus precios en los próximos días, siguiendo la tendencia del mercado y la evolución del conflicto geopolítico que impacta sobre la oferta internacional de petróleo.