Un comerciante denunció el robo del teléfono desde su lugar de trabajo, y horas después un hombre se presentó en la comisaría con los productos comprados por su hijo.
Un hecho de inseguridad ocurrido el 19 de junio en la localidad de Pico Truncado, provincia de Santa Cruz, involucró a menores de edad que sustrajeron un teléfono celular y lo usaron para realizar compras digitales. El caso dio un giro cuando el padre de uno de los implicados se presentó voluntariamente en la comisaría y entregó los productos adquiridos con el dispositivo.
Según fuentes policiales consultadas por La Opinión Austral, el personal de la División Comisaría Segunda intervino tras la denuncia realizada por un vecino de 67 años. El hombre relató que, alrededor de las 16:30 del día anterior, se encontraba trabajando en un local ubicado en la intersección de las calles Pueyrredón y Mitre, cuando varios menores ingresaron al comercio.
Después de merodear unos minutos en el interior del local, uno de los jóvenes sustrajo un teléfono Samsung A31 con funda amarilla que estaba debajo del mostrador. Más tarde, utilizando ese celular, los menores realizaron varias compras en comercios locales mediante la aplicación Mercado Pago.
Ante esta situación, la Policía llevó adelante las diligencias correspondientes, con la participación del Gabinete Criminalístico.
Cerca de las 21:45, un hombre de 49 años se presentó por voluntad propia en la dependencia policial, identificándose como el padre de uno de los involucrados. El hombre entregó los productos adquiridos mediante las compras electrónicas, que fueron secuestrados y puestos bajo custodia policial.
La Secretaría Penal de turno fue notificada y dispuso una consigna policial en una vivienda de la calle Bustos, en el marco de la investigación que lleva adelante el Juzgado de Instrucción N°1.
Durante la jornada, efectivos realizaron un allanamiento en ese domicilio, aunque el procedimiento no arrojó resultados positivos. La Policía de Santa Cruz continúa trabajando en la causa bajo directivas judiciales.